miércoles, 6 de mayo de 2009

FLORES ARRANCADAS DESDE EL PERONÉ


A Marian Raméntol



Tus poemas son crudos
y pasan por el embudo de mi garganta,
me llenan tus flores arrancadas desde el peroné,
desde el inflamado pulmón
que te respira a la distancia y su no sé
que vacía del metro el esternón
de las aves que caben en tu pecho.

Tus poemas tienen lluvia
en sus cráneos multiplicados,
tienen deudas en los agujeros de sus ventanas
y ciclones de arcilla en sus tan abiertas entrañas
que trazan un curvo horizonte de magma.

Tu mano empuña su palabra
como un puñal en la frente,
como un girasol que atraviesa
el vidrio de la luna tuerta,
alquílame tus sueños
y redondea mis uñas en tu dorso uterino
y arráncame el tallo de la soledad
con puentes incrustados en la piel,
con ríos colgantes y panes
que piden crédito para su duda de harina.



Tu sílaba maldita copula
con el hiato de los entreverados
cinceles que empujan
corceles de fruta,
ligamentos de yegua en la bruma.

Detrás de la puerta
eres una niña que zumba;
recostada en la ventana,
una abeja que escribe
en los pistilos,
y que vuela
a la horca de papeles volados
de ojos morosos con satélites espías
que grabaron la sencillez complicada.

Tus poemas
son paisajes líquidos
con mármoles sombríos
cortezas de árbol en el pubis,
certezas de vida en la boca.

1 comentario:

Marian Raméntol dijo...

Gracias de nuevo por tan maravilloso regalo.

Un fuerte abrazo
Marian