viernes, 14 de septiembre de 2007

EL MINISTRO BALA

El ministro bala
licitaciones
y avala
desnudas municiones
con excusas y repeticiones,
la luna sin resguardo,
y a la deriva
la sirena perdida.

El ministro bala
su nariz interpelada,
su fajín ilustre de ala
y su barbilla trasquilada,
nadie lo quiere
pero lo defienden las cabras
y en un abracadabra
lacrimógenas argucias
para la represión
de algún obrero,
dice ser sincero
con sus escaramuzas.

El ministro bala
sin saberse oveja,
pólvora exhala
y la ciudad se deja
al resguardo de las comadrejas
y la policía calata
busca inteligencia
en su cabeza
y la señora delincuencia
coquetea con su corbata.

El ministro bala
y le roban el interior
de la cartera,
secuestran flores
y la hierba juega
con la primavera.

El ministro bala
y el presidente…nada,
y la comisión completa
la comezón de una granada.

El ministro bala,
no aprende y sólo apunta
a los pajaritos,
economiza su pasado
en la valiosa junta
y no se ha acordado
que sólo tiene refritos
en la alfombrada sala.

1 comentario:

Unknown dijo...

Simplemente... me encantooóoo